Los cúmulos estelares son agrupaciones de estrellas que nacieron de la misma nebulosa y en un mismo momento y que están ligadas entre ellas por la gravedad. Por lo tanto, las estrellas de un mismo cúmulo tienen todas ellas la misma edad y la misma composición, pero no tienen porque tener la misma masa y, por tanto, sus evoluciones estelares pueden ser muy diferentes.
Los cúmulos estelares, al estar formados por estrellas formadas en la misma época y de la misma nebulosa, ayudan a entender la evolución estelar. También pueden servir, los más cercanos, para medir sus distancias.
Los cúmulos estelares pueden ser poco densos, de decenas, centenas o millares de estrellas, o bien muy densos, con decenas o centenas de millares de estrellas. En los primeros sus estrellas se separan al poco tiempo (decenas o centenas de millones de años) y, por consiguiente, serán agrupaciones de estrellas jóvenes; son los denominados cúmulos abiertos. En los segundos, sus estrellas se mantendrán unidas durante mucho tiempo (mil o varios miles de millones de años) y, por tanto, serán agrupaciones de estrellas viejas; son los denominados cúmulos globulares.
Entradas:
Entradas de cúmulos abiertos:
- NGC 6611
- M45, las Pléyades
- NGC 6530
- M44, el Pesebre
- NGC 2244
- NGC 6939, un cúmulo abierto en Cefeo
- M52, un cúmulo abierto en Casiopea
- M21, un cúmulo abierto en Sagitario
- NGC 1980 y NGC 1981, dos cúmulos abiertos en la espada de Orión
- M39, un cúmulo abierto en el Cisne
- M35, un cúmulo abierto en Géminis
- NGC 6823, un cúmulo abierto en Vulpecula
- NGC 869 y NGC 884, el doble cúmulo de Perseo
- NGC 6595, un cúmulo abierto en Sagitario
- IC 1590
- NGC 6910
- Berkeley 59
- NGC 1893, un cúmulo abierto en Auriga
Entradas de cúmulos globulares: